Mediación familiar
La mediación familiar es una intervención de una tercera persona cuando existe un conflicto entre miembros de una familia (normalmente la pareja).
Es importante tener en cuenta que esta tercera persona debe ser imparcial y, muy importante también, esta tercera persona nunca decide, sino que ayuda a los implicados en el conflicto a que ellos mismos lleguen a un acuerdo satisfactorio para todos los miembro de la familia (sobre todo los hijos e hijas)
Es importante que se haga una distinción entre lo que sí es mediación familiar y lo que no lo es.
La mediación familiar no es una negociación, ni un arbitraje y, en ningún caso, ha de ser confundida con una conciliación.
En el arbitraje interviene una tercera persona, pero ésta tiene el poder de decidir, y de esto no trata la mediación familiar. En la negociación no interviene una tercera persona, por lo que tampoco se ciñe al concepto de mediación.
En la conciliación, al igual que en el arbitraje o en la mediación, interviene un tercero, pero en este caso éste tiene poder coactivo, es decir, añade obligatoriedad a la hora de tomar decisiones.
Contrariamente, la mediación es un proceso que elegido de forma voluntaria por ambas partes y tiene la finalidad de conseguir como objetivo una serie de acuerdos de intereses tanto para ellos mismos como para los hijos.
Todo este proceso es conducido por el mediador, cuyas características son neutralidad, confidencialidad, imparcialidad y preparación específica en las técnicas que se han de llevar a cabo y poner de manifiesto a la hora de producirse la negociación entre ambas partes, sin la necesidad de una tercera persona que tome un papel determinante en la toma de decisiones.
Le asesoramos e intervenimos en dotar a los miembros de las familias en conflictos a usar dichas técnicas para que puedan, de forma satisfactoria, conducir el proceso de negociación para alcanzar los objetivos propuestos.
En Granada Psicólogos contamos con una amplia experiencia en Mediación familiar, pida cita.