Trastornos de alimentación
¿Qué son los trastornos de alimentación?
Con el término trastornos alimentarios nos referimos a una variedad de trastornos. Se caracterizan por una conducta alimentaria distorsionada que tiene graves consecuencias tanto para la salud física como psicológica. Están acompañadas por una baja autoestima y una mala auto-imagen corporal. Por factores mentales y emocionales el significado de la comida adquiere más importancia que la de su función nutritiva. Los trastornos son mas comunes en países industriales, donde la comida es abundante y el ideal de belleza se define por la delgadez.
Entre otros trastornos alimenticios se diferencian anorexia nerviosa, bulimia nerviosa y trastorno por atracón.
¿Cómo se diferencian los diferentes trastornos?
La anorexia se caracteriza por una perdida de peso intencionada hasta un nivel peligroso (índice de masa corporal menor de 17,5) y un miedo excesivo a ganar peso. La auto-imagen está distorsionada, a pesar de su extrema delgadez se perciben como obesos cuando se ven en el espejo y su autovaloración depende completamente su imagen corporal.
Por falta de nutrición las mujeres pierden la menstruación. Se diferencian entre personas que siguen una dieta extremamente restringida, calculan y controlan cada caloría que consumen y hacen deporte excesivo para alcanzar su peso deseado (Anorexia nerviosa tipo restringido), y las personas que provocan el vómito para deshacerse de calorías (Anorexia nerviosa purging type).
Bulimia y trastorno por atracón tienen en común los atracones de comida que ocurren al menos 2 veces por semana durante más de 3 meses (Bulimia) o 6 meses (trastorno por atracón). Durante un atracón se come una gran cantidad de comida rica en calorías y se produce una pérdida de control sobre lo que se come.
La diferencia entre las dos es que las personas que sufren bulimia toman medidas para deshacerse de todo lo que han comido durante el atracón. Lo más frecuente en éstos casos es provocarse el vómito, muchos toman también laxantes. Las personas que sufren bulimia pueden tener bajo peso, normal o sobrepeso, mientras que los que sufren trastorno por atracón frecuentemente tienen sobrepeso. Todos tienen un punto en común: sufren mucho por los atracones y cómo en la anorexia nerviosa, se autovaloran a través de su cuerpo.
Muchas veces no se pueden diferenciar tan claramente y un trastorno puede llevar a otro. Lo que en la mayoría de los casos acompaña a todos es el sufrimiento, el odio a si mismo y la depresión.
Si una persona tiene atracones de comida, ¿significa que no tiene control y es débil?
No. La mayoría de las personas suelen tener atracones de comida después o mientras realizan una dieta estricta. Un tercio de las personas que participan en programas para adelgazar desarrolla trastorno por atracón. Durante un atracón de comida el cuerpo «busca» aquello de lo que carece. Esto es una reacción normal a la inanición, un mecanismo de supervivencia. Nuestro cuerpo no está desarrollado para las sociedades modernas de abundancia en las que vivimos hoy. En un momento de inanición es normal perder el control sobre lo que se come porque los instintos de supervivencia son más potentes que los pensamientos.
Los trastornos de alimentación suelen ir acompañados de un gran sufrimiento emocional, pudiendo ser causa y/o consecuencia de ello. Pero los atracones a los que nos referimos no tienen que ver con el placer de una buena comida. Las personas que sufren trastorno por atracón o bulimia no pueden disfrutar la comida, con cada mordisco sienten una culpa tremenda que hace crecer la tristeza y el odio hacia sí mismos. No pueden parar de comer cuando les duele el estómago y muchas veces sienten que merecen ese dolor como castigo.
Consecuencias de los trastornos alimentarios
Como hemos descrito antes, los trastornos alimentarios van acompañados casi siempre con el sufrimiento psicológico de la persona, ya sea la causa y/o consecuencia. Es muy común que éste tipo de trastornos se combinen con otros trastornos afectivos como la depresión, trastornos de ansiedad (en el 70% de los pacientes) y fobias sociales. Normalmente, ya antes del trastorno alimentario pueden encontrarse trastornos de estrés postraumático y trastornos de personalidad (por ejemplo trastorno límite de la personalidad).
Aparte de los problemas psicológicos están las consecuencias físicas. En los trastornos en los que se fuerza el vómito se destruye el esmalte dental y puede producirse inflamaciones de la faringe y el esófago. La falta de alimentos puede desembocar en una carencia de hierro, que resulta en agotamiento físico y dolores de cabeza. En los casos graves de anorexia nerviosa también llegan a dañarse riñones, músculos, corazón y huesos. A causa de la inanición el cuerpo está débil y puede llegar a colapsarse fácilmente, situando a las personas en una situación de peligro ante un fallo cardíaco.
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